• Aceptación de la realidad

Cuando una situación no la podemos modificar, lo más saludable es aceptarla y aprender a llevarla de un modo saludable. La colaboración de todos es fundamental. Cada uno de nosotros formamos parte de la solución de este problema.

  • Plan de vida

Tenemos que plantearnos que estamos ante una nueva realidad, que va a ser temporal, pero no por ello tenemos que implicarnos al 100% desde el primer momento. Por ello, tenemos que modificar nuestras rutinas, horarios, actividades…

Es muy importante que tengamos un horario y que le sigamos con bastante exigencia. ¡¡Cuidado con ir dejando las cosas para más tarde!!!

Y finalmente, en nuestro nuevo horario de vida deben estar todas las áreas importantes para nuestro equilibrio personal:

    1. Área académica o laboral: Es interesante que sigamos manteniendo, en la medida de lo posible, nuestras actividades laborales. En caso de que no sea posible, es necesario que incluyamos en nuestro horario o plan de vida actividades intelectuales (estudiar, leer, ampliar conocimientos…)
    2. Área social: Nadie pone en duda la importancia de los amigos. Gracias a las nuevas tecnologías, podemos estar muy cerca de ellos, y es necesario que mantengamos activos todos los contactos, y hacerlo con frecuencia. Llamadas, viodellamadas en grupo, “cañas virtuales” con amigos… son nuestros aliados durante el confinamiento.
    3. Familia: Debido a la situación que estamos viviendo, el contacto con nuestras familias se hace muy complicado. No por eso tenemos que sentirlos alejados. Es importante mantener llamadas frecuentes con nuestros seres queridos, al igual que es un buen momento para volver a tener momentos en familia que antes, por las prisas, distancia…  en ocasiones no podíamos tener.
    4. Cuidado personal: No podemos olvidar el que probablemente es uno de los pilares más importantes en una situación como la que estamos viviendo; el deporte. Necesario y casi imprescindible, el deporte está relacionado con el estado de ánimo, es fundamental para que tengamos un sueño más reparador y por supuesto, nos mantiene en forma y con el peso controlado. Tampoco se puede menospreciar la sensación de bienestar que sentimos después de haber hecho una actividad física. Ahora más que nunca, es necesario que nos cuidemos y pensemos en nosotros mismos. Aspectos como  vestirnos son importantes (quitarnos el pijama y el chándal). También es importante la alimentación. Ahora disponemos de más tiempo y es interesante que comamos mejor, más sano, con comidas de nuestra dieta mediterránea.
  • Mantente informado

Es necesario que estemos informados, ya que la información nos da tranquilidad. Pero es importante que sea información contrastada y veraz. Por ello, recomendamos que se contraste la información y se busque en fuentes oficiales.

Por otro lado, hay que tener cuidado con la sobreinformación. Esto produce desasosiego, angustia… y esto es contraproducente. Por lo tanto, información sí, pero en su justa medida.

Es favorable siempre que también tengamos mensajes positivos, incluso con cierto humor. Y todos, evitemos difundir rumores o noticias no contrastadas.

  • Observa y pregunta por le estado de salud de las personas que te rodean

Sin que se convierta en una obsesión, pero es importante que nos preocupemos por los que están a nuestro alrededor. Sentirse activo, útil para otras personas también nos ayuda a nosotros mismos. Hay muchas iniciativas para ayudar a otras personas y en ocasiones lo podemos hacer con vecinos que lo necesitan.

  • Cuida tu estado de ánimo

Es necesario que cuidemos nuestro estado de ánimo. Con lo indicado anteriormente, vamos a mejorar y estar mucho mejor. Pero no podemos olvidar que el mayor regulador emocional es nuestro cerebro. Debemos tener cuidado con lo que nos decimos y con lo que pensamos, ya que no todo lo que nos decimos es completamente cierto. En ocasiones, anticipamos o amplificamos las situaciones generándonos angustia y malestar. Cuida tu lenguaje interno. Somos lo que pensamos.